Aquí os paso un juego de emparejar conceptos sobre arquitectura griega y un enlace con bastantes imágenes de arquitectura y escultura.
martes, 17 de enero de 2012
domingo, 18 de diciembre de 2011
Alejandro Magno
lunes, 12 de diciembre de 2011
La vida cotidiana de Egipto
Si pincháis AQUÍ podréis ver el vídeo que sobre la vida cotidiana de Egipto vimos en clase.
viernes, 18 de noviembre de 2011
Cleopatra
Cleopatra nació el 69 antes de Cristo y y al morir su padre tuvo que compartir el reino con su hermano Ptolomeo. Esto no le gustaba a la reina que quería reinar en solitario y fue acusada de iniciar diversas campañas para acabar con la vida de Ptolomeo, por eso la reina tuvo que huir de Egipto aunque con la intención de provocar una guerra civil para conquistar el poder. Lo que ocurre en Egipto se mezcla con lo que ocurre en Roma porque al mismo tiempo César y Pompeyo estaban enfrentados y el primero era aliado de Ptolomeo. César salió triunfante al acabar con la vida de su rival, pero su aliado egipcio cambió porque Cleopatra, utilizando su conocida sensualidad, le sedujo y tuvieron un sonado romance que duró nueve meses y cuyo fruto fue un hijo llamado Cesarión.
Sin embargo, Cleopatra se enamoró de otro romano, el general Marco Antonio que, a su vez, tenía grandes diferencias con Octavio, que era su cuñado. El amor triunfó con Marco Antonio que se separó de la hermana de Octavio, lo que provocó que se enfrentaran en la batalla de Accio (entre el 36 y el 31 a C). Marco Antonio cayó derrotado y Cleopatra intentó seducir a Octavio. Pero la reina ya estaba mayor y Octavio era más bien frío, y lo que decidió fue llevarla a Roma como trofeo de guerra. Esa humillación era imposible de soportar para Cleopatra que prefirió suicidarse cuando al quedarse sola en su habitación puso un áspid (una tipo de culebra venenosa) en su pecho, corría el año 30 a. de C. Al enterarse Marco Antonio de la noticia decidió hacerse matar.
Esta historia que parece más bien frívola la protagoniza una reina que al presentarse por primera vez en público, con 14 años, ya entonces era famos por su sabiduría. Se dice que hablaba siete u ocho idiomas entre ellos griego, hebreo, sirio, egipcio y arameo; sabía de música, historia y ciencias políticas. Además era muy buena en matemáticas, literatura, astronomía y medicina. Se dice que conocía y entendía a la perfección el latín, aunque esto no se ha podido comprobar.
Sobre su personalidad se dice que era impulsiva, caprichosa, ingenua, espontánea, apasionada, diplomática y constante.
Tenéis dos imágenes, una es un dibujo en el que aparece cómo podría ser en realidad la reina, y en el otro el cartel de una película de los años 60 que se llamaba "Cleopatra" protagonizada por Elizabeth Taylor.
lunes, 7 de noviembre de 2011
"Ojo por ojo, diente por diente"
Seguro que muchos de vosotros habréis oído esa expresión de "ojo por ojo, diente por diente", es decir que cuando uno comete un delito o una falta el castigo que recibirá es lo mismo que el autor habría cometido inicialmente.
A esta forma de entender la justicia se le llama ley del talión (del latín "talis" que significa idéntico o semejante) y en el primer registro legal en el que aparece es en el Código de Hammurabi, que es el primer código escrito de la historia. Algunas de las normas que aparecen en ese código son:
La Ley 229 establecía que si un arquitecto construía una casa para otro, no la había hecho sólida, y si la casa construida se derrumbaba matando al propietario de la misma, el arquitecto sería muerto; dicho concepto se acentúa cuando se señala que (Ley. 230) si la casa se había derrumbado matando al hijo del propietario de la casa, se mataría al hijo del arquitecto.
Algunas penas consistían en la mutilación de una parte del cuerpo en proporción al daño causado. Por ejemplo la Ley 195 establecía que si un hijo había golpeado al padre, se le cortarían las manos; la 196 sostenía que si un hombre libre vaciaba el ojo de un hijo de otro hombre libre, se vaciaría su ojo en retorno (aquí queda clarísimo lo del ojo por ojo); la Ley 197 ratificaba que si quebraba un hueso de un hombre, se quebraría el hueso del agresor; la Ley 200 es como las anteriores pero en este caso ¡es la del diente!
Pero también había normas como: "Si un hombre ha acusado a otro hombre y le ha atribuido un asesinato y éste no ha sido probado en su contra, su acusador será condenado a muerte."
Las 282 leyes del código están inscritas con escritura cuneiforme en una estela (la de la foto) en la que también aparece el personaje que da nombre al código, en la actualidad se encuentra en el Museo Louvre de París. Por cierto ¿alguien me podría decir quién era Hammurabi y contar algo de su vida?
miércoles, 2 de noviembre de 2011
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