lunes, 7 de noviembre de 2011

"Ojo por ojo, diente por diente"



Seguro que muchos de vosotros habréis oído esa expresión de "ojo por ojo, diente por diente", es decir que cuando uno comete un delito o una falta el castigo que recibirá es lo mismo que el autor habría cometido inicialmente.

A esta forma de entender la justicia se le llama ley del talión (del latín "talis" que significa idéntico o semejante) y en el primer registro legal en el que aparece es en el Código de Hammurabi, que es el primer código escrito de la historia. Algunas de las normas que aparecen en ese código son:

La Ley 229 establecía que si un arquitecto construía una casa para otro, no la había hecho sólida, y si la casa construida se derrumbaba matando al propietario de la misma, el arquitecto sería muerto; dicho concepto se acentúa cuando se señala que (Ley. 230) si la casa se había derrumbado matando al hijo del propietario de la casa, se mataría al hijo del arquitecto.

Algunas penas consistían en la mutilación de una parte del cuerpo en proporción al daño causado. Por ejemplo la Ley 195 establecía que si un hijo había golpeado al padre, se le cortarían las manos; la 196 sostenía que si un hombre libre vaciaba el ojo de un hijo de otro hombre libre, se vaciaría su ojo en retorno (aquí queda clarísimo lo del ojo por ojo); la Ley 197 ratificaba que si quebraba un hueso de un hombre, se quebraría el hueso del agresor; la Ley 200 es como las anteriores pero en este caso ¡es la del diente!

Pero también había normas como: "Si un hombre ha acusado a otro hombre y le ha atribuido un asesinato y éste no ha sido probado en su contra, su acusador será condenado a muerte."

Las 282 leyes del código están inscritas con escritura cuneiforme en una estela (la de la foto) en la que también aparece el personaje que da nombre al código, en la actualidad se encuentra en el Museo Louvre de París. Por cierto ¿alguien me podría decir quién era Hammurabi y contar algo de su vida?

1 comentario:

Anónimo dijo...

hola pedro somos rafa y josué de 1ºc nada era para que supieras que nos ha gustado mucho